S.E. el Presidente de la República, Gabriel Boric Font, anuncia proyecto de ley que pone fin al CAE y crea nuevo instrumento de Financiamiento Público para la Educación Superior

La noche de ayer, el Presidente Gabriel Boric Font se dirigió al país a través de Cadena Nacional para anunciar el envío de un proyecto de ley al Congreso que pondrá fin al Crédito con Aval del Estado (CAE) y creará un nuevo sistema de financiamiento para la educación superior: el Financiamiento Público para la Educación Superior (FES). Esta reforma pretende dar solución al endeudamiento que afecta a más de un millón de personas en Chile, especialmente a quienes no han podido pagar sus créditos o no finalizaron sus estudios.
Motivos de la reforma
El CAE, instaurado en 2005, fue un mecanismo que permitió el acceso a la educación superior a un mayor número de estudiantes. Sin embargo, con el tiempo se convirtió en una carga financiera para muchos egresados, quienes se ven atrapados en una deuda que afecta su estabilidad económica y la de sus familias. Hasta la fecha, el Estado ha desembolsado más de 9 mil millones de dólares para financiar este sistema, generando una fuerte presión sobre las finanzas públicas.
El Presidente destacó que el CAE no solo es un problema para quienes lo adeudan, sino también para el país en su conjunto, ya que impacta negativamente tanto a las personas como a las arcas fiscales. En este sentido, la política no puede seguir postergando la solución a este problema que afecta a tantas familias chilenas.
Pilares del proyecto de ley
La propuesta del gobierno se basa en tres grandes objetivos:
1. Condonación parcial de las deudas educativas: El Estado condonará un porcentaje de las deudas acumuladas por los estudiantes que accedieron a la educación superior a través del CAE. La condonación se determinará según factores como si el estudiante terminó su carrera, si ha mantenido sus pagos al día y el número de cuotas abonadas.
2. Reorganización de la deuda restante: Para aquellos que aún tengan deuda tras la condonación, se propondrán dos alternativas. La primera permitirá saldar la deuda pagando el 75% del saldo restante; la segunda ofrecerá la posibilidad de reprogramar las cuotas en función de los ingresos de cada persona, con un tramo exento de pago. Este nuevo sistema será más flexible y las cuotas serán más bajas que las actuales.
3. Creación del Financiamiento Público para la Educación Superior (FES): Este nuevo sistema de financiamiento permitirá a los estudiantes cursar sus carreras sin pagar aranceles, salvo para el 10% de los estudiantes con mayores ingresos, quienes deberán realizar un copago. El FES eliminará el endeudamiento durante el periodo de estudios y, en su lugar, los egresados deberán hacer una retribución al Estado una vez que se incorporen al mundo laboral, en función de sus ingresos, con un tope del 8% de su sueldo. Este sistema estará basado en los principios de solidaridad y progresividad, asegurando que quienes más puedan, más aporten, y quienes menos puedan, cuenten con mayores facilidades.
Impacto en los estudiantes y el sistema educativo
El Presidente Boric estimó que, de aprobarse el proyecto, más de 75 mil personas verán completamente saldadas sus deudas con el CAE, mientras que muchas otras se beneficiarán con la condonación parcial y la reorganización de sus pagos. Además, las personas cuyos ingresos sean menores al salario mínimo quedarán exentas de la obligación de retribuir.
Por otro lado, los bancos no participarán en este nuevo modelo de financiamiento, eliminando así la especulación y los intereses de lucro. El sistema estará supervisado directamente por el Estado, lo que permitirá un uso más eficiente y transparente de los recursos públicos destinados a la educación superior.
Expectativas de la reforma
La creación del FES supone un ahorro fiscal a largo plazo, ya que el nuevo sistema requerirá menos desembolso estatal que el CAE. A su vez, permitirá a los jóvenes estudiar sin el estrés financiero que actualmente provoca el endeudamiento. Según Boric, esta es una oportunidad histórica para que Chile recupere la educación como motor de cohesión social y movilidad económica.
El Presidente concluyó su discurso con un llamado al Honorable Congreso Nacional para aprobar este proyecto de ley, que busca aliviar el endeudamiento de miles de familias chilenas y garantizar un acceso más equitativo a la educación superior.
«Esta es nuestra oportunidad de hacer justicia a quienes han cargado con una mochila pesada durante años, de construir un sistema de educación superior que dé esperanza y tranquilidad a las futuras generaciones de nuestro país», afirmó Boric.